Para empezar, hablemos de comida. Las calabazas y las batatas son perfectas para esta temporada, ¡y además son buenísimas para la piel! Son ricas en betacaroteno, que el cuerpo transforma en vitamina A, un nutriente clave para mantener la piel tersa y radiante. Asimismo, las frutas de temporada como las manzanas y las granadas están repletas de antioxidantes que ayudan a proteger la piel del daño, por lo que son ideales para comer como tentempié o añadir a ensaladas y batidos.
Otro aspecto importante es mantenerse hidratado, tanto interna como externamente. Aunque haga más frío, beber suficiente agua sigue siendo fundamental. También puedes consumir alimentos ricos en agua, como pepinos y naranjas, para mantener tu piel fresca. Las grasas saludables, como las que se encuentran en el aguacate y los frutos secos, también son excelentes para mantener la piel hidratada y radiante. Un puñado de almendras o una tostada de aguacate pueden ser de gran ayuda para combatir la sequedad.
En cuanto al cuidado de la piel, esta temporada requiere una hidratación extra. Busca productos con ácido hialurónico: es un potente hidratante que retiene la humedad en la piel, algo esencial cuando el aire se vuelve más seco. Además, las ceramidas son excelentes para reforzar la barrera natural de la piel, manteniéndola fuerte y previniendo la pérdida de hidratación. Si puedes, usa una crema hidratante más rica por la noche para ayudar a tu piel a recuperarse mientras duermes.
Así que, una combinación de superalimentos otoñales e ingredientes hidratantes para el cuidado de la piel puede marcar una gran diferencia. ¡Pruébalos y cuéntame si tu piel se siente más hidratada y radiante esta temporada!